lunes, 28 de febrero de 2011

Cazador que vas de caza...

"Cazador en el bosque"  (1813)
Caspar David Friedrich 

Cazador alto y tan bello
como en la tierra no hay dos,
se fue de caza una tarde
por los montes del Señor.

Seguro llevaba el paso,
listo el plomo, el corazón
repicando, la cabeza
erguida, y dulce la voz.

Bajo el oro de la tarde
tanto el cazador cazó,
que finas lágrimas rojas
se puso a llorar el sol…

Cuando volvía cantando
suavemente, a media voz,
desde un árbol, enroscada,
una serpiente lo vio.

Iba a vengar a las aves,
mas, tremendo, el cazador,
con hoja de firme acero
la cabeza le cortó.

Pero aguardándolo estaba
a muy pocos pasos yo...
Lo até con mi cabellera
y dominé su furor.

Ya maniatado le dije:
–Pájaros matasteis vos,
y voy a tomar venganza,
ahora que mío sois...

Mas no lo maté con armas,
busqué una muerte peor:
lo besé tan dulcemente
¡que le partí el corazón!

Envío

Cazador: si vas de caza
por los montes del Señor,
teme que pájaros venguen
hondas heridas de amor.

"Romance de la venganza"
Alfonsina Storni

domingo, 27 de febrero de 2011

Tanto soñé contigo...

Edmund Charles Tarbell


                                                                             "A la mystérieuse"   

Tanto soñé contigo que pierdes tu realidad.

¿Todavía hay tiempo para alcanzar ese cuerpo vivo
y besar sobre esa boca el nacimiento de la voz que quiero?
Tanto soñé contigo que mis brazos habituados a cruzarse
sobre mi pecho cuando abrazan tu sombra,
quizá ya no podrían adaptarse al contorno de tu cuerpo.

Y frente a la existencia real de aquello que me obsesiona y me gobierna
desde hace días y años, seguramente me transformaré en sombra.
Oh balances sentimentales.


Tanto soñé contigo que seguramente ya no podré despertar.
Duermo de pie, con mi cuerpo que se ofrece a todas las
apariencias de la vida y del amor y tú, el único que cuenta
ahora para mí, más difícil me resultará tocar tu frente
y tus labios que los primeros labios y la primera frente
que encuentre.


Tanto soñé contigo, tanto caminé, hablé, me tendí al lado de
 tu fantasma que ya no me resta sino ser fantasma entre
los fantasmas, y cien veces más sombra que la sombra que
siempre pasea alegremente por el cuadrante solar de tu vida.

De "Corps et Biens"
Robert Desnos
Versión de Aldo Pellegrini

miércoles, 23 de febrero de 2011

Enhebrando quimeras

"Mujer tejiendo"

Edmund Charles Tarbell

Se me han ido las horas en tejer un encaje,
en prender una cinta y en bordar una flor...
Se me han ido las horas en mirar un paisaje,
y en oír una fuente y en copiar un celaje,
y en hacer una rima y en soñar un amor.
Se me han ido las horas enhebrando quimeras,
y tejiendo locuras imposibles de ser...
Se me han ido las horas  -golondrinas viajeras-
y han pasado los sueños como nubes ligeras,
por mi triste y errante corazón de mujer.
Se me han ido las horas...No me dejes, amado,
arrollar por la ola de la vida vulgar.
Ven a mí, dulce dueño, tanto tiempo esperado
y al arrullo divino de tu verso encantado,
¡que me duerma en tus brazos para no despertar!

"Se me han ido las horas en tejer un encaje"
Margarita Mondragón    

domingo, 20 de febrero de 2011

Melancolía

"Melancolía" de Edgar Degas (1874)


Polvo de oro en tus manos fue mi melancolía
sobre tus manos largas desparramé mi vida;
mis dulzuras quedaron a tus manos prendidas;
ahora soy un ánfora de perfumes vacía.

Cuánta dulce tortura quietamente sufrida
cuando, picada el alma de tristeza sombría,
sabedora de engaños, me pasaba los días
¡besando las dos manos que me ajaban la vida!

"Dulce tortura"
Alfonsina Storni

domingo, 13 de febrero de 2011

En el bosque

"Muchacha en el bosque" (1882)
 Vincet Van Gogh

Como es de amantes necesaria usanza
huir la companía y el ruido,
vagaba en sitio solo y escondido
como en floresta umbría un siervo herido.

Y a fe que aunque cansado de esperanza
pido al bosquecillo remenbranza
y en cada cosa suya semejanza
con el ser que me olvida y que no olvido.
Enrique Banchs
de "La urna"

sábado, 12 de febrero de 2011

A orillas del río

Durante su estancia en Bennecourt, a orillas del Sena, Monet realizó esta maravillosa escena protagonizada por Camille, su compañera con la que había tenido un hijo. Camille se sitúa bajo unos árboles a orillas del río, junto a un bote. Al fondo vemos las casas del pueblo, algunas de ellas reflejadas en el agua.


"A orillas del río" de Claude Oscar Monet (1868)

Tu vida es un gran río, va caudalosamente.
A su orilla, invisible, yo broto dulcemente.
Soy esa flor perdida entre juncos y achiras
que piadoso alimentas, pero acaso ni miras.

Cuando creces, me arrastras y me muero en tu seno;
cuando secas, me muero poco a poco en el cieno;
pero de nuevo vuelvo a brotar dulcemente
cuando en los días bellos vas caudalosamente.

Soy esa flor perdida que brota en tus riberas
humilde y silenciosa todas las primaveras.

"Soy esa flor"
Alfonsina Storni 

viernes, 11 de febrero de 2011

Las amapolas de Monet



 "Amapolas en Argenteuil"  de Claude Oscar Monet  (1873)

En esta oportunidad las amapolas llegan de la mano de una pintura de Monet, pintor francés considerado el más importante y obstinado representante del impresionismo.
Durante la estancia de Monet en Argenteuil la naturaleza se convertirá en la verdadera protagonista de sus lienzos, como en esta obra, en donde las figuras parecen fundirse con el paisaje. Su mujer Camille y su hijo Jean pasean por los campos de amapolas de Argenteuil acompañados por otra pareja al fondo. La línea del horizonte se puebla de árboles y el azul del cielo se ve interrumpido por las blancas nubes que se desplazan en una magnífica sensación de movimiento. La iluminación del atardecer inunda de sombras malvas el campo, destacando la tonalidad rojiza de las amapolas.

jueves, 3 de febrero de 2011

Angeles de las cosas

Ángeles de las cosas
vestidos de infinito
que apoyáis vuestras manos
en mis hombros transidos,
dadme dos alas blancas
como al ave del nido,
que inicia suavemente
su vuelo en el destino.

                                          Enrique Banchs
                                   (Andando mi sendero)


"Angeles" Rafael